154

El primer carrete que fotografié en Terezin no se expuso bien. A uno le gustaría argumentar algún tipo de razón metafísica, tan propia para las circunstancias. Pero su explicación seguramente sea más sencilla, pueril, diría, y no se deba más que a la confusión entre un carrete blanco y negro y otro en color, entre una sensibilidad y otra. Un negativo donde se insinúan retazos, signos. Unas líneas apenas perceptibles que dan cuenta de una realidad que no llegó a cristalizar.  

Días previos al rodaje de mi film sobre Walter Benjamin recuerdo una pesadilla: «un cuarto oscuro, un negativo que a punto de revelarse se vela… una capa gris que lo diluye todo…». A mitad de rodaje, otra, si bien distinta, recurrente en su sentido íntimo: una entrevista cuyo audio no quedaba grabado.  

(septiembre 2012) 

141

Me metí con lo más terrible, lo más difícil. Las pesadillas invaden mis noches. Hay días que tengo imperativos deseos de detenerme. Me pregunto si tengo derecho siquiera a desenterrar a los muertos… Sé que no soy dueño de esta historia. No soy yo el que decido ni el que elige. Pero tengo el deber de insinuar lo que sé… 

(agosto 2004)

#49

Acabo de llegar a Portbou. Me pregunto si la primer mirada es la que marca todas las miradas que vendrán a continuación. ¿Se puede forzar la emoción? ¿Se puede repetir?
[ octubre 2014 ]

#39

Pienso en el sentido de la profecía. ¿De qué sirve anunciar la catástrofe? ¿La previene? ¿Hace que la gente cambie de parecer? Benjamin y su aviso de incendio. ¿Pudo evitarlo acaso? Ni siquiera pudo evitar quemarse él mismo.

#28

Tras la presentación del film, un espectador me pregunta: “Entonces, ¿quién mató a Walter Benjamin?» Y sin pensarlo, contrario a todas mis costumbres, como un acto reflejo, contesto: «los benjaminianos, por supuesto». El público ríe, festejando la broma.
Lo que no saben, es que cada día estoy más convencido de esta verdad y que no se trataba de broma alguna.

#12

Que Walter Benjamin está de moda, no quedan dudas. Uno lo encuentra mencionado hasta entre aquellos que deberían sonrojarse por citarlo. Hace unos días  leía a un político citando a Walter Benjamin… me dio un no se qué… ¿una persona asociada al poder que tiene la osadía de citar a quién no detentó cargo público alguno, a quién nunca fue miembro oficial de grupo o partido? Se debería ser más modesto, más honesto… y recordar que la memoria de quién muere solo en la frontera no debería ser mancillada por los labios de quién no tuvo el coraje de renunciar a los halagos parasitarios del poder.